En terrenos
ganados
al río
de la
Plata
en la
década
de 1990
se fueron
asentando
allí
diversas
especies
de aves
y mamíferos.
Poco a
poco la
vegetación,
con aportes
de la
inundaciones
ribereñas,
contribuyó
a una
rápida
recuperación
de la
vegetación,
dando
lugar
al asentamiento
permanente.
En la
acualidad
miles
de visitantes
recorren
diariamente
la Reserva
en búsca
de tranquilidad
y contacto
con la
naturaleza.
Expuesta
a la expansión
de la
Ciudad
es afectada
por incendios
períodicos,
muchas
veces
provocados
por inadapatdos. |