Explosión de Biodiversidad

En la Hostería Rincón del Socorro, en el Iberá, la Naturaleza se encuentra al alcance de la mano. Ñandúes, carpinchos y ciervos deambulan en las inmediaciones y las aves, con su cacofonía permanente, nos maravillan con su diversidad y colorido. Es otro emprendimiento donde el Capital Natural forma parte del negocio constituyendo una sinergia positiva que potencia la conservación de la naturaleza y el desarrollo de los negocios.

Michel H. Thibaud, Director, Patrimonionatural.com

La Estancia Rincón del Socorro, ubicada en los Esteros del Iberá, se ha constituido en uno de los principales bastiones de la conservación de la Naturaleza por propietarios privados.  Enclavada en el Iberá, a pocos kilómetros de Colonia Carlos Pellegrini, esta tradicional estancia correntina se ha transformado en uno de los más llamativos y emblemáticos lugares turísticos de nuestro país, comparable con el Delta del Okavango, en el Africa.

Esto ha sido posible gracias a la visión y el entusiasmo de Douglas y Kris Tompkins, quienes compraron la propiedad en la década de los ’90 y la dedicaron a la conservación. Actualmente integrada con otras propiedades en la Fundación Conservation Land Trust tiene por objetivo la conservación de la naturaleza y la recuperación de especies autóctonas. Para ello se han levantado los alambrados y se ha erradicado la hacienda vacuna y lanar. Toda la propiedad, de unas 12.000 hectáreas en este caso, está destinada a la preservación de la fauna y la flora autóctonas.

Pero esta tarea no consiste sólo en dejar todo librado al azar y esperar que la naturaleza haga su juego. Sino que se invierte fuertemente en actividades de investigación para comprender cómo evoluciona el ecosistema. Biólogos, entomólogos, botánicos y demás científicos trabajan en forma permanente a fin de definir las interrelaciones de este gran humedal. Rincón del Socorro es un testimonio a la esperanza de que nuestros suelos, puedan ser restaurados a su original riqueza biológica y a su antigua biodiversidad.

Si bien la tarea filantrópica que se han impuesto los propietarios es muy importante, no debemos despreciar los esfuerzos que se hacen en la búsqueda de una salida económica para este emprendimiento correntino. Ya no se mide la capacidad de carga del campo por la cantidad de kilos de carne producidos por hectárea, o la cantidad de cabezas de ganado que soporta la propiedad. Ahora los guarismos son diferentes: pululan los carpinchos, los yacarés, ciervos de los pantanos y multiplicidad de aves. Esta es la nueva “carga productiva” que debiera ser calculada y evaluada, para comparar si se pueden obtener “beneficios” que igualen o superen la tradicional actividad ganadera.

En cuanto a la generación de empleo no hay dudas que actualmente, sólo en personal directo que trabaja en el campo se ha superado en varias decenas al personal anterior. Sobre todo se los ha capacitado y muchos de ellos cuentan con viviendas de una calidad impensada hace unos años atrás en la Provincia. La escuela que funciona en el casco de la estancia demuestra la calidad de vida y la capacitación que se pretende dar a quienes colaboran en este gran proyecto.

Hostería

El atractivo mayor es sin duda la Hostería Rincón del Socorro que se ha desarrollado en el antiguo casco de la estancia. De esta forma personas amantes de la naturaleza, con inquietudes de conocer las regiones más prístinas de nuestro país, cuentan con las comodidades necesarias para pasar unos días en este cómodo y placentero lugar.

Con una reconstrucción digna de ser tenida en cuenta se han respetado las líneas arquitectónicas tradicionales y se ha decorado sus interiores con muebles y enseres de la zona. La casa principal, el casco, construido en el año 1896 por los fundadores de la estancia, ha sido transformada y acondicionada para servir hoy de hosteria. Construida en clásico estilo español, la casa ha sido completamente reciclada, respetando la línea arquitectónica original.  Los huéspedes aún podrán apreciar los interesantes y originales diseños de esta reconocida casona. La restauración del edificio llevó dos años de minucioso trabajo, usando la misma madera que se encuentra en la zona para construir ventanas y puertas. Grandes han sido los esfuerzos por mantener la integridad de la estructura original, agregando el confort de un servicio de primer nivel.

Dirigida por Leslie y Valerie Cook la Hostería es un pequeño pero refinado y sofisticado hotel para eco-turismo. Cuenta con seis habitaciones en la casa principal y tres pequeñas cabañas a cincuenta metros de la hostería, todas con baño privado. La hostería tiene un living y sala de estar exterior, restaurante, terrazas, galerías, sala de juegos para chicos, monturero y área de salida de cabalgatas, pileta de natación y quincho.

En las comidas predominan las frutas y verduras orgánicas, la mayoría de la propia huerta. La hostería está equipada con una cocina profesional. Se especializa en alta cocina orgánica, brindando buenos vinos argentinos y produciendo su propio pan. Los postres son una delicia. Cuenta con un completo servicio de bar con una parrilla donde se hacen los típicos asados, que suelen servirse en una terraza al aire libre. También cuenta con otros servicios como lavandería, e-mail, fax, teléfono, salidas en lancha, cabalgatas, bicicletas y lavadero de autos.

Los huéspedes podrán encontrar vestigios de la vieja estancia ganadera, pero con el pasar del los años la antigua infraestructura va cediendo al nuevo proyecto de restauración de flora y fauna del Socorro. La fauna silvestre tímidamente comienza a retomar su territorio ahora que los perros de la estancia no están más.

Reportaje a Leslie Cook

Patrimonionatural.com: Estamos en Rincón del Socorro con Leslie Cook, administrador de la hosteria. En primer lugar, Leslie, ¿cuál es el origen del nombre del lugar?

Leslie Cook: El origen, es jesuítico. Rincón del Socorro es un nombre eclesiástico ya que viene de la iglesia. Esta zona tenía la influencia de las Misiones Jesuitas de San Carlos.
Concretamente no sé si en este lugar hubo una misión jesuita, pero seguramente era un lugar de paso. Se han encontrado, por ejemplo, tramos del Camino Real, que pasa por el medio del Estero del Iberá. Está más hacia el norte, en San Alonso. Era un camino jesuitico bien marcado. Por consiguiente creo que este era un lugar de paso de los jesuitas, pero sin asentamientos permanentes.

PN: ¿Como se hacen cargo vos y Valerie de la Hostería? Contame la historia de por qué vienen a  Rincón del Socorro.

LC: Nosotros comenzamos desarrollando un emprendimeinto turístico en Calafate en el año 1994 y conocimos a los Tompkins en el 2002. Ellos estaban recorriendo la Patagonia y se alojaron en la hostería que nosotros administrábamos en el sur. Así se dieron varios factores que incidieron sobre nuestra venida a estos pagos correntinos. Pero creo que al ser mi familia de Corrientes y tener experiencia en turismo –hacía 8 años que estabamos en Calafate– fueron los dos puntos más importantes en la selección para que nos hiciéramos cargo de manejar y administrar el desarrollo de este proyecto.

PN: ¿Cómo surge entonces la propuesta?

LC: Una vez que nos conocen nos proponen la idea. Esto estaba en sus comienzos, recién empezaba la reconstrucción y casi todo estaba en obra. El desafío era a su vez interesante y complicado.
Era difícil imaginar que la Hostería Rincón del Socorro pudiese llegar a funcionar. En un principio dudábamos venir acá. Teníamos en el sur nuestro trabajo, un lugar ya consolidado y con fama internacional. Esto era en ese momento sólo un proyecto. Los profesionales que reconstruian este lugar eran bastante ecepticos.

Si bien esto es Iberá, no nos olvidemos que estamos a 30 km de la laguna. No era necesariamente atractivo, no era un lugar muy lindo, pero tenía su “personalidad”, ese toque de exótico y salvaje muy buscado por el público extranjero.

Aparte, y creo que fué lo más interesante para nuestra decisión, es que nos gustó el lugar. Finalmente nos decidimos venir y nos quedamos. Empezamos a trabajarlo turísticamente haciendo mucha tarea de promoción, armando programas e inventando paquetes. Conseguimos que una consultora en Buenos Aires nos ayudara en ventas y a recorrer agencias. Así fuimos conociendo a las agencias con más perfil de pasajeros que viniesen a un lugar como este y terminamos hoy trabajando en un 80% con huéspedes y gente de Inglaterra, con agencias inglesas.

Esto tiene su explicación ya que el Iberá cuenta con mucho atractivo en lo que es avifauna y los ingleses son lejos el mejor target. Ellos son los que más buscan lugares, safaris y sitios donde la naturaleza está en un estadio salvaje. Esto les gusta para traer a su gente. La gran ayuda fue viajar a Inglaterra y entrevistar personalmente a las agencias de este nicho del negocio. Son agencias grandes, conocidas y prestigiosas que ofrecen y garantizan productos de calidad. A partir de ahí, con mucho esfuerzo y aprendizaje, el proyecto arrancó y tuvo un crecimiento satisfactorio hasta el 2008. En ese año sufrimos, como todos, la crisis que nos hizo retroceder un montón, sobre todo porque teníamos un público extranjero y sobre todo inglés. Ellos ante las crisis son muy prudentes y nos suspendieron casi todas las reservas. En el año 2009 remontamos lentamente y en el 2010 estamos terminando casi tan bien como el 2008. Por eso esta recuperación nos da esperanzas de un crecimiento interesante para los próximos años, si no aparece otra crisis mundial.

PN: ¿A quien pertenece la hosteria Rincón del Socorro?

LC: La hostería es de la Fundación Conservation Land Trust. Nosotros tenemos la concesión de la hosteria mediante una empresa creada para tal fin. Contratamos el personal y nos hacemos cargo absolutamente de todos los costos que implica mantener un servicio de calidad internacional. La fundación mantiene el predio, realiza trabajos de investigación sobre la flora y la fauna del Iberá y esto le da un mayor atractivo ya que a veces los pasajeros pueden conversar con los investigadores e interiorizarse sobre lo que se hace en Rincón del Socorro. Esto es mucho más que una hostería ubicada en el Iberá. En realidad es un centro de conservación de la Naturaleza, que además cuenta con una hostería. El Capital Natural que aprovechamos es importante y sabemos que mientras se conserve tendrá razón de ser la hostería.

PN:  ¿Cual es el principal atractivo que ustedes promocionan con respecto a Rincón del Socorro?

LC: Rincón del Socorro, es un pie para acceder a la laguna Iberá. Esta laguna es como la frutilla del postre. Recorrer en lancha la laguna es el programa por el cual vienen los turistas y lo que nosotros más promocionamos.  El paseo por el Arroyo Corrientes es una experiencia inolvidable. La gran variedad de fauna y sobre todo su mansedumbre. Ver un ciervo de los pantanos a poca distancia, o un yacaré tomando sol casi en la proa del bote no es algo común. Esto es lo exótico, lo extraordinario de este lugar. Pero también la abundancia impresiona pues en cada recodo, a la vuelta de cada camalote se puede encontrar multiplicidad de aves, carpinchos, ciervos de los pantanos, yacarés y cuanta fauna vive allí. La flora también es apabullante convirtiendo el paseo en algo realmente exótico. Alojarse en la Hostería Rincón del Socorro, es como alojarse en una savana en el Africa y esto es lo que la gente está empezando a asociar. El paisaje, la savana, la laguna y los esteros, con su vegetación flotante, los montes de espinillo y los palmerales son muchos ambientes diferentes en un espacio tan pequeño. El visitante tiene oportunidad de recorrerlos a todos sin cubrir grandes distancias.

No son muchos los lugares en la Argentina, y en el mundo, donde se tiene una estancia de 12.000 hectáreas dedicada a la naturaleza. Es una reserva que ha erradicado los animales domésticos –tanto vacas como ovejas tan típicos de Corrientes–. Por consiguiente los espacios vacíos han vuelto a ser ocupados por la fauna autóctona. Hoy salir a recorrer este lugar constituye un paseo espectacular.

Poco a poco ves como la fauna se va acostumbrando y por consiguiente se dejan observar. Mismo en el parque de la hostería deambulan tranquilamente los ñandúes, con sus charitos. Se pueden ver también carpinchos y algún que otro ciervo de los pantanos un poco más lejos. Esto, vuelvo a insistir, constituye un inmenso capital natural que los pasajeros aprecian y disfrutan.

PN: Me comentaste que los principales visitantes son de Inglaterra ¿Han hecho encuestas de la satisfacción del visitante con respecto a este lugar?

LC: Continuamente hacemos consultas para mejorar el servicio. En las encuestas de satisfacción del visitante los resultados son excelentes. Pero esto es también mi principal “dolor de cabeza”, por que yo digo: “Por qué si el grado de satisfacción es tan grande, esto no tiene 3 años en lista de espera”. Realmente la gente la pasa muy bien y les gusta; les parece increíble encontrar este lugar en la Argentina; se quedan fascinados. Con un grado de satisfacción enorme y con sólo ver el lugar me hace pensar: “Esto debería tener lista de espera, porque está realmente muy bueno”.

Sin embargo, no es así. Básicamente el problema es que no está cerca de un aeropuerto. A las agencias de viajes no les interesa venderlo pues no combina con los itinerarios tradicionales. Por ello hay que salir a venderlo uno mismo. Esto como destino se está consolidando. El “boca a boca, aunque parezca una herramienta de promoción poco eficiente” tiene su resultado, pero no es lo mismo que trabajar con una agencia que te trae corporativos de 20 personas o dos o tres grupos de corporativos o incentivos que, como Calafate, como Ciudad Azul que siempre esta lleno. Acá no, son parejas, son individuos, por consiguiente es mucho más lo que hay que remarla. No somos un destino tradicional de la Argentina y eso se nota.

PN: ¿Ustedes cómo compatibilizan el tema de la naturaleza con el negocio?

LC: Es fundamental. Nuestro negocio es naturaleza 100%. Si no tuviéramos esta explosión de naturaleza, directamente no tendríamos ninguna viabilidad como hostería. Esto sería como la Laguna de Chascomus. Tenemos nivel internacional pues la gente que estuvo en Botswana o en el Delta el Okavango, en el Africa, lo comparan con esos destinos.  Esto se debe a la fauna y a su mansedumbre –a la posibilidad de observarla de cerca en su ambiente natural y sin rejas como en un zoológico– resultado del cuidado en la preservación del medioambiente. Si no hubiera fauna esto sería una laguna común, para hacer winsurf o para andar en lancha, pero no tendría las visitas que tiene de todo el mundo.

PN: ¿Contame lo que me decías el otro día con respecto al premio que les dieron?

LC: Entre las agencias inglesas que van enviando pasajeros Abercrombie & Kent –especializada en viajes de lujo por el mundo- trabaja con nosotros. El feedback que ellos recibían de sus pasajeros era tan bueno que estaban realmente sorprendidos. Es así que envían a una periodista de acostumbrada a hacer recorridos por todo el mundo visitando los diferentes segmentos de la hotelería. Dentro de la rama de la hotelería hay muchas categorías y esta persona llegó para analizar nuestro lugar y los servicios que brindamos.

Ella se alojó aquí sin advertirnos de su tarea y le pareció que Rincón del Socorro y San Alonso eran los dos mejores Eco-resort que había visitado en el mundo entero. Para nosotros fue un premio, un reconocimiento importantisimo, la verdad, ahí si que uno dice: “La pucha, fijate que hay lugares…” Como decía, hay lugares en Africa con muchisimos mas años que nosotros, uno siempre mira afuera y que cree que en Africa encontrás, dentro de este segmento del safari, lo mejor ya que es muy de ellos. Sin embargo, nosotros al tercer año de abrir con un Iberá que es incipiente, que no tiene ni siquiera 10 años en el mercado, hoy estamos en lo más alto, con un premio y un reconocimiento nuevo.

PN: ¿Ustedes sabían que venia esta persona hacerle ese analisis?

LC: No, para nada. Ella venía como un huesped convencional que pagó, se alojó y realizó las excursiones. Después que se fue nos llegó una carta y nos llamaron por teléfono y dijeron que nos habían elegido. Había seis categorías definidas, con seis hoteles seleccionados en el mundo entero, obviamente dentro del segmento Eco-Resort o de lo que es Eco-Lodge. Nosotros ganamos el premio, junto con gente de la India que habian ganado el premio al hotel más exótico; con una señora de Grecia que había ganado, también en la categoría de hoteles chicos de pocas habitaciones; un Forth Season que también había ganado. Dentro de distintos segmentos había seis hoteles elegidos en el mundo y nosotros fuimos uno de ellos.

PN: ¿Dentro de lo que es la estancia, los circuitos los han diseñado de alguna manera o han utilizado los caminos, los senderos que ya existían? ¿Cómo se manejaron en ese sentido?

LC: No, hasta ahora los senderos los fuimos haciendo entre nosotros. Salir a explorar, ya que en la sabana no es trekking como por ahí tenes en la montaña, o en la Patagonia. Aquí tenes que salir a explorar y el mejor medio para hacerlo es el caballo. Recorrer la sabana a caballo por ahí es lo más lindo y lo que más nos gusta. Hay que ir viendo, jugando un poco con las horas del día, las tardecitas, las mañanas temprano, vas viendo la luz, cuales son los mejores momentos para salir, cuales son los mejores momentos para ver fauna y en qué lugares. Así que fuimos armando los senderos en función de complacer a nuestro público. Nosotros tenemos visitantes de luna de miel y también de 65, 70 años que ya son tercera edad. Es una gama bastante amplia. También vienen familias, o sea, que abarcamos un poco todos los segmentos de público. Hay que desarrollar actividades que complazcan a todos y es en función a este criterio que hicimos los senderos actuales.

PN: ¿Cuáles son los planes futuros para la hostería?

LC: Queremos promocionar más la venida de extranjeros. Por ello estamos pensando instalar una oficina permanente en Iguazú. Allí se vendería el paquete por uno o dos días y se traería a los visitantes en avión privado hasta la Estancia. Como podrás ver esto es sólo para un público exclusivo, de alto poder adquisitivo. Este público está en Iguazú y muchas veces no tienen allí la suficiente oferta de servicios para ese nivel. Por eso creo que podemos convertirnos en una alternativa interesante, algo diferente que potencie a Iberá, uno de los humedales más importantes del mundo.